Alergia a la leche

"Con el tratamiento de desensibilización alimentaria en apenas 3-4 meses, el paciente puede llegar a ingerir un vaso de leche al día sin ningún problema".

DRA. CARMEN D'AMELIO GARÓFALO
ESPECIALISTA. DEPARTAMENTO DE ALERGOLOGÍA E INMUNOLOGÍA CLÍNICA

¿Cómo saber si tengo alergia a la leche?

La alergia a la leche, como alimento básico que es, tienen una repercusión importante en la calidad de vida de los pacientes afectados, dada su presencia en multitud de alimentos elaborados y en gran cantidad de productos cocinados.

La recomendación inicial es suprimir este alimento de la dieta pero esto conlleva que sean muchos los alimentos que no pueden consumirse.

El tratamiento de desensibilización alimentaria o inducción a la tolerancia oral de la proteína de leche de vaca consigue en aproximadamente 3-4 meses, que el paciente puede consumir un vaso (200 ml) de leche al día.

En algunos pacientes, en donde la sensibilidad a la leche no es muy elevada, se puede realizar una desensibilización exprés y en menos de 7 días se consigue la tolerancia.

En el Departamento de Alergología de la Clínica tenemos amplia experiencia en el tratamiento de inducción a la tolerancia oral y cada paciente es valorado de manera individualizada. Durante todo el proceso es supervisado por nuestro equipo de alergólogos y enfermeras especializadas en el control de este tratamiento.

¿Cuáles son los síntomas de la alergia a la leche?

Los síntomas de la alergia a la leche pueden ser muy variados, desde molestias leves tras la ingestión hasta reacciones alérgicas graves.

El cuadro clínico puede ocurrir tras el primer contacto o ir apareciendo de manera paulatina e ir aumentando tras el consumo repetido de alimentos que contengan leche o trazas de leche.

Los síntomas comienzan con picor en la zona de boca y farínge, habones en la piel con un picor intenso (urticaria) y en los casos más graves, angioedema. Son frecuentes también los síntomas respiratorios, como rinitis, conjuntivitis y crisis de asma.

Los síntomas más habituales son:

  • Picor en boca y paladar
  • Ronchas y habones por la piel
  • Rinitis y/o conjuntivitis
  • Dificultad respiratoria
  • Crisis de asma

Pueden aparecer de manera más tardía vómitos, dolor abdominal, naúseas, vómitos y diarrea.

En los casos más graves se puede desarrollar un shock anafiláctico, viéndose comprometida la vida del paciente.

¿Tiene alguno de estos síntomas?

Puede que tenga alergia a la leche y sea posible realizar el tratamiento de desensibilización alimentaria

¿Cuáles son las causas de la alergia a las proteínas de la leche?

Son muchos los factores que pueden provocar la respuesta inmunitaria anómala frente a las proteínas de la leche de vaca u otros animales.

El contacto previo con la leche, a través de la madre durante el embarazo o la lactancia materna y por supuesto, la ingestión de productos lácteos o que contengan trazas de leche desencadena la producción excesiva de Ig E, causando los síntomas.

La alergia a la leche es distinta que la intolerancia a la lactosa, en la primera existe una respuesta inmunitaria del organismo, en la intolerancia existe un déficit de enzimas capaces de digerir este componente, lo que causa los síntomas, predominantemente digestivos.

¿Se cura la alergia a la leche?

En niños pequeños, la alergia a la leche puede desaparecer de manera espontánea pero en un 20% de los casos, la alergia persiste.

Cuando la alergia a la leche comienza en la edad adulta es mucho más difícil que desaparezca y puede durar ya toda la vida.

Si el tratamiento de desensibilización alimentaria o inducción de tolerancia oral a la leche es eficaz, estos pacientes pueden volver a ingerir productos lácteos y sus derivados con total tranquilidad. Esto hace que su calidad de vida mejore de manera notable.

¿Cómo se diagnostica la alergia a la leche?

<p>&nbsp;Pruebas cutaneas</p>

El diagnóstico se realiza mediante un test cutáneo (prick test) muy sencillo: se aplica sobre la piel del brazo gotas que contienen una cantidad conocida del alergeno causante de la alergia a la leche. El fundamento de esta técnica es reproducir en la piel la reacción que presentamos en otras partes del organismo.

Además, es posible realizar análisis de sangre, con lo que de una forma más precisa podemos cuantificar y demostrar la presencia de Ig E específica frente a estas proteínas.

A veces, hay que realizar una prueba de provocación, que consiste en observar bajo control médico la reacción que se produce tras la ingesta del alimento.

Además de las pruebas cutáneas habituales, podemos medir la IgE por microarray, lo que nos da información valiosa sobre los alérgenos que reconoce el paciente.

¿Cómo se trata la alergia a la leche?

Contamos con una gran experiencia en la desensibilización frente a distintos alimentos como el huevo, la leche y ahora también, el pescado.

La primera medida y más eficaz es evitar el contacto con el alérgeno.

La leche y los productos lácteos se encuentran en muchos alimentos. Las formas más obvias son la nata, yogures, quesos, mantequilla, helados, etc. pero pueden estar también ocultos en otros alimentos, por lo que es recomendable leer detenidamente las etiquetas de estos productos. 

El tratamiento de desensibilización a la leche es sencillo y se basa fundamentalmente en reeducar a las células que reaccionan ante alimentos inocuos como puede ser, en este caso, la leche. Esta reeducación pasa por administrar cantidades muy pequeñas de leche, al principio ínfimas, que se van aumentando progresivamente -estos incrementos se efectúan siempre en el recinto hospitalario- para que el cuerpo vaya asimilando estas sustancias sin reaccionar contra ellas. Así hasta llegar a la dosis objetivo: un vaso de leche (200 ml). Este proceso suele tardar unos 3-4 meses y se consigue una tasa de éxito muy alta.

Este tratamiento precisa que en todo momento, el personal sanitario controle de manera muy cercana este proceso para evitar reacciones alérgicas importantes.

Esto se complementa con educación al paciente y su familia para enseñarles a evitar el contacto con este alimento y aprender a actuar frente a reacción alérgicas graves.

Superar la alergia a la leche en una semana

Cuando la sensibilización al producto es baja y si el sistema inmune del niño lo permite, la ‘dosis objetivo’ puede conseguirse en cinco días.

Este proceso de desensibilización “exprés” está indicado para pacientes con una sensibilización no muy elevada a estos alimentos y una edad comprendida entre los 4 y los 10 años.

¿Dónde lo tratamos?

EN NAVARRA Y MADRID

Departamento de Alergología
de la Clínica Universidad de Navarra

El Departamento de Alergología e Inmunología de la Clínica forma parte de la Global Allergy and Asthma European Network, compuesta por los 25 mejores departamentos de Alergología de Europa, elegidos por su excelencia científica, su trabajo multidisciplinar, su docencia y sus actividades internacionales.

Disponemos de las técnicas diagnósticas más avanzadas, estamos a la vanguardia en investigación y colaboramos con los mejores expertos. Nos avalan más de 50 años de trayectoria asistencial.

¿Qué enfermedades tratamos?

Imagen de la fachada de consultas de la sede en Pamplona de la Clínica Universidad de Navarra

¿Por qué en la Clínica?

  • Más de 50 años de experiencia.
  • Pioneros en la técnica de diagnóstico molecular por microarray.
  • Enfermería especializada en enfermedades alérgicas y sus cuidados.