Anafilaxia

¿Qué es la anafilaxia?

La anafilaxia es una reacción alérgica, aguda, sistémica y grave. 

  • Alérgica: es una reacción de hipersensibilidad inmediata tipo I, en la que las células del sistema inmune (mastocitos y basófilos), al exponerse al alérgeno, liberan mediadores (triptasa e histamina entre otros) responsables de los síntomas.
  • Aguda: instauración muy rápida (minutos o pocas horas) tras exposición al alérgeno.
  • Sistémica: afectación generalizada, al menos de dos órganos. 
  • Grave: potencialmente mortal.

¿Es muy frecuente la anafilaxia?

A pesar de la alta incidencia de enfermedades alérgicas, este cuadro es muy poco frecuente. Existen pocos datos sobre su frecuencia. Se estima que afecta entre 3,2 y 30 personas de cada 100.000 cada año, con una mortalidad entre 0,05 y 2% del total de reacciones graves.

Una vez se ha tenido un episodio de anafilaxia, la probabilidad de que repita puede llegar a ser hasta de un 20%. Por eso es tan importante acudir al médico especialista en alergología para hacer un estudio dirigido a intentar identificar la causa y poder así tomar medidas de evitación o indicar un tratamiento específico en un futuro.

¿Cuáles son los síntomas de la anafilaxia?

Se debe sospechar una anafilaxia cuando aparecen de forma rápida (en minutos o pocas horas) síntomas progresivos que afectan a la piel y/o a las mucosas (picor, enrojecimiento generalizado, habones, hinchazón de labios/párpados) y que se acompañan a la vez de síntomas en al menos otro órgano/aparato: respiratorio (falta de aire, silbidos en el pecho, sensación de hinchazón en la garganta, ronquera), cardiovascular (palpitaciones, disminución de la tensión arterial, somnolencia, confusión, mareo, pérdida de conciencia) o digestivo (vómitos, náuseas). 

En algunas anafilaxias graves puede no haber afectación cutánea. Cuando existe afectación cardiovascular con hipotensión se habla de shock anafiláctico. 

¿Tiene alguno de estos síntomas?

Puede que haya sufrido un shock anafiláctico

¿Cuáles son las causas de la anafilaxia?

Las casusas más frecuentes de anafilaxia son los alimentos, fármacos, picaduras de insectos (principalmente himenópteros: avispas y abejas) y factores físicos. Varía en función de la edad: los alimentos es la causa más frecuente en la infancia y los fármacos en adultos. En cuanto a los himenópteros hay grandes variaciones en función del grado de exposición en las distintas regiones geográficas.

El látex constituye una causa a tener presente en el medio hospitalario. Otra causa que considerar en España es la alergia a Anisakis simplex (parásito del pescado), presente hasta en el 11,3% de los casos de anafilaxia.

En el caso de la alergia a alimentos hay que tener en cuenta el denominado “efecto cofactor”, que es la capacidad de diversos factores (menstruación, alcohol, ejercicio físico, AINEs, infecciones, fiebre…) para incrementar la gravedad de la reacción.  

¿Cómo se diagnostica la anafilaxia?

Realización de una prueba cutánea para el diagnóstico de alergias.<br/><br/><br/>

El diagnóstico de anafilaxia es fundamentalmente clínico, por la rápida instauración y progresión de síntomas característicos que afectan a piel y/o mucosas y otros órganos/aparatos (respiratorio, digestivo, cardiovascular). Sin embargo, cuando faltan las manifestaciones cutáneas, o se produce un colapso vascular aislado, la anafilaxia se puede confundir con otras enfermedades.

Ante la sospecha de anafilaxia debe solicitarse una analítica con niveles seriados de triptasa (de forma similar a como se realiza una curva de enzimas cardiacas ante la sospecha de un infarto de miocardio). Se tomará la primera muestra tras la instauración del tratamiento, la segunda a las 2 horas y una tercera al menos 24 horas después. Una elevación significativa confirmará la anafilaxia, aunque valores normales no la descartan, especialmente en casos de anafilaxia por alimentos.

El diagnostico diferencial de la anafilaxia implica considerar todas otras causas de obstrucción respiratoria y de colapso vascular, incluyendo el tromboembolismo pulmonar, las arritmias cardiacas, el taponamiento cardiaco, infarto agudo de miocardio, etc.  

En niños deben considerarse situaciones graves como el shock séptico (fiebre, exantema purpúrico, palidez generalizada) u otras sin alto riesgo como la hipotonía tras espasmo del sollozo o las crisis comiciales hipotónicas.
 

¿Cómo se trata la anafilaxia?

La anafilaxia es una urgencia médica que requiere un tratamiento inmediato

El tratamiento del shock anafiláctico está enfocado principalmente a estabilizar al paciente y prevenir posibles complicaciones graves. Aquí se detallan las diferentes medidas que se deben tomar para abordar esta emergencia médica.

Medidas de emergencia y atención médica inmediata

Ante la sospecha de una anafilaxia, es esencial buscar atención médica de emergencia de inmediato. Mientras se espera a que llegue el equipo médico. Iremos tomando unas primeras medidas se soporte vital básico: revisaremos vía aérea (retirar objeto/alimento en caso de atragantamiento) y después colocaremos al paciente en posición horizontal de lado (para evitar aspiraciones en caso de que pueda vomitar) y con las piernas elevadas (para remontar el flujo sanguíneo en caso de mareo o pérdida de conciencia).

Administración de la adrenalina

La adrenalina es el fármaco de elección para el tratamiento inmediato del choque anafiláctico. Se administra mediante una inyección intramuscular en la cara anterolateral del muslo y actúa de manera rápida en la estabilización de los síntomas. Si no mejora después de 5 minutos, administrar segunda dosis de adrenalina (ocurre en el 10% de los casos), sólo el 2% requieren más de 2 dosis de adrenalina.

Es importante llevar siempre consigo un dos autoinyectores de adrenalina en caso de una reacción anafiláctica, entrenamiento regular en su uso y revisar periódicamente su caducidad. 

Los efectos adversos de la adrenalina no son habituales ni graves en la mayoría de las personas y el riesgo vital de una anafilaxia es alto por lo que se recomienda la administración de la adrenalina en caso de duda. 

Cuando ocurra una reacción anafiláctica siempre debe acudir a un centro de urgencias médicas, tras la utilización de un auto-inyector de adrenalina. Recuerde que la pluma de adrenalina no sustituye a la atención médica urgente.

Medicamentos y terapias complementarias

Junto con la administración de adrenalina, otros medicamentos pueden ser utilizados como parte del tratamiento del shock anafiláctico, como una segunda línea. Estos pueden incluir antihistamínicos especialmente indicados para tratar los síntomas cutáneos y corticosteroides para acortar reacciones prolongadas, cuestionado su eficacia en cuanto a prevención de reacciones bifásicas.

Además, en algunos casos, se pueden utilizar terapias complementarias como la nebulización con solución salina para mejorar la función respiratoria y el uso de broncodilatadores para facilitar la respiración. Sin embargo, es importante destacar que estos tratamientos complementarios deben ser indicados por un médico especialista. En casos muy graves puede llegar a ser necesario el empleo de drogas vasoactivas o desfibrilador y traslado a unidad de cuidados intensivos.

Tanto las personas en riesgo de sufrir una anafilaxia como su entorno (familiares, compañeros de trabajo, etc.) deberían ser instruidos para reconocer los síntomas de una anafilaxia de forma precoz y así poder iniciar el tratamiento sin necesidad de esperar la llegada de los servicios de urgencias.

Para ello deberían recibir la educación y el entrenamiento en la utilización de su autoinyector de adrenalina. Es importante que practiquen con regularidad con un dispositivo de entrenamiento adecuado, de modo que sepan qué hacer ante una urgencia.

Anafilaxia bifásica

La anafilaxia bifásica es una reacción recurrente o la aparición de nuevos síntomas tras la presentación inicial sin que haya otra exposición al agente causal.  Ocurre en el 4-4,5% de las reacciones anafilácticas. Después de haber sufrido una anafilaxia debe permanecer en observación en urgencias al menos 6-8 horas.

Un tiempo superior a 60 minutos desde el inicio de los síntomas hasta la administración de la primera dosis de adrenalina y la necesidad de más de una dosis para controlar la anafilaxia primaria son predictores de reacción bifásica.

¿Qué debo hacer después de la anafilaxia?

Una vez resuelto el episodio debe solicitar cita preferente en alergología. El estudio se realizará en base a una historia clínica dirigida y la realización de pruebas diagnósticas (pruebas cutáneas, pruebas de laboratorio, pruebas de exposición controlada). 

Es muy importante que intente recordar todas las circunstancias en que sufrió la anafilaxia pues son datos vitales para que su alergólogo dirigir el estudio para intentar encontrar la causa de su reacción.

La primera pregunta va a ser si tiene alguna alergia conocida y si se expuso a dicho alérgeno. Si no identificó en ese momento el desencadenante de la reacción, le irán haciendo un interrogatorio exhaustivo acerca de la hora en que ocurrió, si había tomado algún alimento o medicamento horas antes, si había tomado alcohol o realizado ejercicio, si estaba con la menstruación, tenía fiebre o alguna infección, o si le pudo picar alguna abeja o avispa.

En esa consulta de alergología se le darán las indicaciones precisas de medidas de evitación del alérgeno si ha sido identificado, se le pautará un “kit de emergencia” y se le adiestrará en el uso del autoinyector de adrenalina. 

En caso de ser alérgico al veneno de himenópteros, se le pautará una vacuna específica para ello, que son altamente eficaces. En los casos de anafilaxia en los que no se pueda establecer un agente causal (anafilaxia idiopática), especialmente si son recurrentes, se debe descartar la existencia de un síndrome de activación mastocitaria y en algunos casos concretos mastocitosis sistémica.

¿Dónde lo tratamos?

EN NAVARRA Y MADRID

Departamento de Alergología
de la Clínica Universidad de Navarra

El Departamento de Alergología e Inmunología de la Clínica forma parte de la Global Allergy and Asthma European Network, compuesta por los 25 mejores departamentos de Alergología de Europa, elegidos por su excelencia científica, su trabajo multidisciplinar, su docencia y sus actividades internacionales.

Disponemos de las técnicas diagnósticas más avanzadas, estamos a la vanguardia en investigación y colaboramos con los mejores expertos. Nos avalan más de 50 años de trayectoria asistencial.

¿Qué enfermedades tratamos?

Imagen de la fachada de consultas de la sede en Pamplona de la Clínica Universidad de Navarra

¿Por qué en la Clínica?

  • Más de 50 años de experiencia.
  • Pioneros en la técnica de diagnóstico molecular por microarray.
  • Enfermería especializada en enfermedades alérgicas y sus cuidados.

Preguntas frecuentes sobre el shock anafiláctico

Un shock anafiláctico es una emergencia médica que requiere atención inmediata. En caso de shock anafiláctico, siga estos pasos:

  1. Llame a Emergencias: Llame inmediatamente al servicio de emergencia médica local (p.ej. 112 en España).
  2.  Uso de Adrenalina: Si la persona afectada tiene un autoinyector de epinefrina, úselo de inmediato.
  3. Posición del paciente: Coloque a la persona en una posición cómoda, preferiblemente tendida y elevando las piernas, a menos que le cause dificultad para respirar.
  4. Mantenga la calma: Mantenga usted y a la persona afectada lo más calmada posible y permanezca con ella hasta que llegue ayuda médica.
  5. Evite el agente causante: Si es posible, evite el contacto continuo con el alergeno desencadenante.
  6. RCP si es necesario: Si la persona deja de respirar o no tiene pulso, inicie la reanimación cardiopulmonar (RCP).

Hay varios signos y síntomas tempranos que podrían indicar el desarrollo de esta grave reacción alérgica.

Reconozca los síntomas precursores:

  • Picazón intensa.
  • Erupción cutánea o urticaria.
  • Hinchazón de la cara, labios, lengua o garganta.
  • Sensación de calor o ruborización.

Identifique síntomas respiratorios:

  • Dificultad para respirar.
  • Sibilancias o sonidos agudos al respirar.
  • Sensación de constricción en la garganta.

Observe síntomas digestivos:

  • Náuseas o vómitos.
  • Dolor abdominal.
  • Diarrea.

Vigile cambios circulatorios:

  • Palidez o color azul en la piel.
  • Pulso débil o rápido.
  • Presión arterial baja.
  • Mareo o desmayo.

Busque asistencia médica:

Si reconoce estos síntomas y sospecha que alguien podría estar experimentando un shock anafiláctico, busque ayuda médica inmediatamente o llame a los servicios de emergencia.

No hay un tiempo específico de duración para un shock anafiláctico, ya que esto puede variar significativamente de un caso a otro.

Intervención Rápida:

Con intervención médica rápida y adecuada, que incluye la administración de epinefrina y soporte vital avanzado, los síntomas pueden mejorar en minutos a horas.

Hospitalización:

Aún con tratamiento, la persona afectada normalmente necesita ser hospitalizada para monitorizar su estado y prevenir una reacción bifásica (un segundo episodio de anafilaxia).

Reacción Bifásica:

Esta reacción puede ocurrir hasta 72 horas después de la exposición al alérgeno y es una continuación de la reacción anafiláctica inicial.

La adrenalina, también conocida como epinefrina, es el tratamiento de primera línea para el shock anafiláctico. Su administración es crucial durante un episodio de anafilaxia.

Contracción de los músculos del bronquio:
La adrenalina relaja los músculos de los bronquios, permitiendo que se abran y se mejore el flujo de aire, lo cual es crucial para superar la dificultad respiratoria.

Vasoconstricción:
Actúa sobre los vasos sanguíneos, causando su constricción. Esto ayuda a mejorar la presión arterial y a reducir la hinchazón y la urticaria.

Prevención de la liberación de más mediadores inflamatorios:
Inhibe la liberación adicional de sustancias químicas mediadoras de la inflamación y de la reacción alérgica por parte de los mastocitos y basófilos.

Aumento de la frecuencia cardíaca:
Puede incrementar la frecuencia cardíaca, lo que es útil en situaciones donde el corazón está latiendo de forma muy lenta debido a la reacción alérgica.

Reducción de la hinchazón y enrojecimiento:
Al reducir el flujo sanguíneo a áreas afectadas, la adrenalina puede disminuir la hinchazón y el enrojecimiento asociados con la reacción anafiláctica.

La dosis de adrenalina (epinefrina) para el tratamiento de un shock anafiláctico depende de factores como el peso y la edad del paciente, y se debe administrar conforme a las recomendaciones médicas y protocolos clínicos establecidos.

Debe ser su médico el que le indique la cantidad recomendada en su caso.

Adultos y Niños Mayores:
Dosis Estándar para Adultos y Niños Mayores de 30 kg:
Generalmente, la dosis de epinefrina autoinyectable para adultos y niños que pesan 30 kg o más es de 0.3 mg (miligramos).

Niños:

  • Dosis para Niños entre 15 y 30 kg (aproximadamente de 3 a 11 años): La dosis usual es de 0.15 mg.
  • Dosis para Niños Menores de 15 kg: Los niños que pesan menos de 15 kg, generalmente menores de 3 años, podrían necesitar una dosis menor, que debe ser determinada y administrada por un profesional médico.

Vía de administración:
La adrenalina se administra mediante inyección intramuscular en el muslo externo y puede administrarse a través de la ropa si es necesario.

Dosis adicional:
En algunos casos, puede ser necesario administrar dosis adicionales si los síntomas no mejoran después de unos minutos.

Atención Médica:
Inmediatamente después de la administración de epinefrina, se debe buscar atención médica de emergencia, incluso si los síntomas parecen haber mejorado.