Cáncer de próstata recurrente: jornada científica para profundizar en los últimos avances diagnósticos y terapéuticos

Especialistas de Urología y Oncología Radioterápica de la Clínica Universidad de Navarra (Madrid) realizan una sesión científica para acercar su experiencia a la hora de detectar de forma temprana recaídas del cáncer de próstata gracias al PET-TAC con galio PSMA 

Doctores Bernardino Miñana y Felipe Calvo durante la jornada científica sobre cáncer de próstata recurrente

25 de abril de 2022

La Clínica Universidad de Navarra ha organizado en su sede de Madrid una jornada de la mano de los directores del Departamento de Urología y Oncología Radioterápica, Bernardino Miñana y Felipe Calvo, sobre el diagnóstico y tratamiento de precisión del cáncer de próstata recurrente detectado por PET PSMA. El evento, que tuvo lugar durante dos días, estuvo dirigido a urólogos y oncólogos radioterápicos.

Durante ambas sesiones, los asistentes recibieron nociones teóricas y prácticas sobre varios aspectos como la utilidad del PET Ga PSMA (un radiofármaco de máxima sensibilidad para localizar tumores de próstata) en la práctica clínica diaria, cirugía, braquiterapia de rescate local, biopsias de fusión de lesión recurrente o protonterapia de rescate (la radioterapia externa más precisa que existe), entre otros.

Otros muchos profesionales formaron parte del evento como ponentes: Dra. Macarena Rodríguez, especialista en Medicina Nuclear; Dr. Guillermo Andrés y Dr. Guillermo Barbas, especialistas en Urología; Dr. Guillermo Gallardo, especialista en Radiología; y los doctores Felipe Calvo, Javier Aristu y Mauricio Cambeiro, especialistas en Oncología Radioterápica.

Uso de PET PSMA: conocer con precisión las recaídas para aumentar las opciones terapéuticas

Tal y como explica el Dr. Miñana: “En la Clínica utilizamos un método diagnóstico que posibilita saber con exactitud si existe una recidiva (recaída) del tumor prostático, el lugar donde se aparece y su nivel de agresividad gracias a las biopsias de fusión. Antes de disponer de esta prueba no podíamos saber a ciencia cierta la localización de las recidivas, solo podíamos intuirlo”, indica. 

El proceso comienza una vez que el PSA (antígeno prostático específico) comienza a subir en pacientes que habían sido intervenidos previamente. “Primero realizamos una prueba diagnóstica con PET-TAC en la que utilizamos como radiofármaco el Ga PSMA. Nos informa exactamente de la localización del tumor, incluso antes de ser visible con otras técnicas, lo que nos ha permitido ser capaces de estandarizar los patrones de recurrencia y cuál puede ser el tratamiento más apropiado para cada uno. Por tanto, el paciente tiene un abanico mayor de posibilidades terapéuticas”, concluye.