DICCIONARIO MÉDICO

Úlcera diabética

¿Qué es la úlcera diabética?

La úlcera diabética es una complicación crónica y frecuente de la diabetes mellitus que afecta principalmente a los pies de los pacientes. Se trata de una herida abierta y de difícil cicatrización, que puede desarrollarse en cualquier parte del cuerpo, pero es más común en las extremidades inferiores, debido a la combinación de factores como la neuropatía diabética, la enfermedad vascular periférica y la infección.

La neuropatía diabética es una alteración en los nervios que puede causar la pérdida de la sensibilidad en los pies. Esto dificulta la percepción del dolor, la presión o el calor, lo que lleva al paciente a no darse cuenta de pequeños traumas o lesiones. La enfermedad vascular periférica, por su parte, se refiere al estrechamiento u obstrucción de los vasos sanguíneos, lo que disminuye el flujo sanguíneo y el aporte de oxígeno y nutrientes a los tejidos. Además, la diabetes también afecta al sistema inmunológico, lo que aumenta la susceptibilidad a las infecciones.

El diagnóstico de la úlcera diabética se basa en la evaluación clínica, el historial médico y la inspección cuidadosa de la lesión. Además, se pueden realizar pruebas complementarias como el índice tobillo-brazo, la ecografía Doppler, la angiografía o la resonancia magnética para evaluar el estado vascular.

El tratamiento de la úlcera diabética tiene como objetivo controlar la infección, mejorar la cicatrización y prevenir complicaciones. Las estrategias terapéuticas incluyen:

  • Control glucémico: Mantener los niveles de azúcar en sangre dentro de los rangos recomendados es fundamental para prevenir la progresión de la úlcera y favorecer la cicatrización.
  • Desbridamiento: La eliminación del tejido necrótico y desvitalizado es esencial para reducir la carga bacteriana y estimular la regeneración del tejido sano.
  • Tratamiento antimicrobiano: Se puede utilizar una combinación de antibióticos tópicos y sistémicos para controlar las infecciones bacterianas.
  • Terapia de presión negativa: Consiste en aplicar una presión negativa en la herida mediante un dispositivo de vacío, lo que promueve la formación de tejido de granulación y acelera la cicatrización.
  • Cuidado del pie diabético: La higiene, el uso de calzado adecuado y la prevención de traumatismos son fundamentales para evitar la formación de úlceras diabéticas.
  • Revascularización: En casos de enfermedad vascular periférica severa, se pueden realizar procedimientos quirúrgicos, como la angioplastia o el bypass, para restablecer el flujo sanguíneo.

La prevención de las úlceras diabéticas es crucial, ya que estas lesiones pueden llevar a complicaciones graves, como la infección ósea, la gangrena o la amputación. Un enfoque multidisciplinar, que incluya la educación del paciente, el control metabólico y el seguimiento regular por parte de profesionales de la salud, es fundamental para minimizar los riesgos y garantizar una atención adecuada.

© Clínica Universidad de Navarra 2023

Imagen de un icono blanco con unas manos cuidando un corazón.

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