DICCIONARIO MÉDICO
Maniobra de Milch
La maniobra de Milch es una técnica ortopédica utilizada para la reducción cerrada de luxaciones de hombro, particularmente en casos de luxación glenohumeral anterior. Es una maniobra ampliamente empleada debido a su relativa facilidad, efectividad y bajo riesgo de causar complicaciones. Esta técnica debe su nombre al médico alemán Paul Milch, quien la describió como una alternativa menos traumática para manejar esta condición. La maniobra de Milch está diseñada para reposicionar la cabeza del húmero dentro de la cavidad glenoidea mediante movimientos suaves y controlados, minimizando el riesgo de daño a los tejidos blandos circundantes, los vasos sanguíneos y los nervios del hombro. La maniobra de Milch es un procedimiento clínico que se utiliza para reducir una luxación anterior de hombro. Este tipo de luxación ocurre cuando la cabeza del húmero se desplaza hacia adelante y fuera de la cavidad glenoidea, lo que provoca dolor intenso, incapacidad funcional y deformidad visible en el hombro afectado. El objetivo de esta maniobra es reposicionar la cabeza humeral en su lugar anatómico mediante tracción y rotación externa, restableciendo la función articular y aliviando el dolor del paciente. Es una técnica menos agresiva en comparación con otras maniobras y puede realizarse con el paciente consciente o bajo sedación leve, según la situación clínica. La ejecución de la maniobra de Milch se realiza siguiendo estos pasos: Esta maniobra debe realizarse con movimientos controlados para evitar causar dolor innecesario o daño a las estructuras articulares y periarticulares. La maniobra de Milch está indicada en los siguientes casos: Siempre es esencial evaluar cuidadosamente al paciente para descartar lesiones asociadas, como fracturas o daño neurovascular, antes de realizar esta maniobra. La maniobra de Milch debe realizarse con precaución y siempre por un profesional médico capacitado. A continuación, se enumeran algunas precauciones y contraindicaciones importantes: Aunque es una técnica generalmente segura, la maniobra de Milch puede estar asociada con las siguientes complicaciones si no se realiza adecuadamente: Estas complicaciones resaltan la importancia de realizar esta técnica únicamente bajo supervisión médica experta. Es fundamental buscar atención médica inmediata en las siguientes situaciones: Un tratamiento oportuno puede prevenir complicaciones graves y acelerar la recuperación. Puede causar algo de incomodidad, pero se realiza con movimientos suaves para minimizar el dolor. En casos necesarios, se puede administrar sedación o anestesia local. Tiene una alta tasa de éxito, especialmente en luxaciones recientes y sin complicaciones. Sin embargo, en algunos casos, puede ser necesario emplear otras técnicas o procedimientos quirúrgicos. Es importante inmovilizar el hombro durante el período indicado por el médico y seguir un plan de fisioterapia para recuperar la función y prevenir nuevas luxaciones. No tratar una luxación puede llevar a complicaciones como daño permanente en los nervios o vasos sanguíneos, inestabilidad crónica del hombro o desarrollo de artrosis precoz. Solo debe ser realizada por un médico especialista, como un ortopedista o un médico de emergencias, para garantizar la seguridad y efectividad del procedimiento. © Clínica Universidad de Navarra 2023Qué es la maniobra de Milch
Cómo se realiza la maniobra de Milch
Indicaciones de la maniobra de Milch
Precauciones y contraindicaciones
Complicaciones asociadas a la maniobra de Milch
Cuándo acudir al médico
Preguntas frecuentes sobre la maniobra de Milch
¿Es dolorosa la maniobra de Milch?
¿La maniobra de Milch siempre es efectiva?
¿Qué cuidados se deben seguir después de la reducción de una luxación de hombro?
¿Qué riesgos existen si no se trata una luxación de hombro?
¿Quién puede realizar la maniobra de Milch?