DICCIONARIO MÉDICO

Colecistoquinina

Qué es colecistoquinina

La colecistoquinina (CCK) es una hormona peptídica producida principalmente en el intestino delgado —específicamente en el duodeno y yeyuno— en respuesta a la presencia de alimentos, especialmente grasas y proteínas, y también actúa como neurotransmisor en el sistema nervioso central.

Su función principal consiste en estimular la contracción de la vesícula biliar y promover la secreción de enzimas digestivas pancreáticas, además de regular la saciedad y retrasar el vaciado gástrico.

Dónde se produce y cómo se libera

Se sintetiza en las llamadas células I de la mucosa intestinal. Cuando el quimo (mezcla de alimentos parcialmente digeridos) rico en grasas o aminoácidos llega al duodeno, estas células liberan colecistoquinina en la sangre y, en menor medida, en el cerebro.

Funciones principales

La colecistoquinina desempeña múltiples papeles clave para una digestión eficaz y regulación del apetito:

  • Contracción vesicular: induce la expulsión de la bilis al duodeno, facilitando la emulsión de grasas.
  • Secreción pancreática: estimula la liberación de enzimas necesarias para la digestión de nutrientes.
  • Relajación del esfínter de Oddi: permite el paso de bilis y enzimas al intestino (vía colangio-duodenal).
  • Retraso del vaciado gástrico: ralentiza la llegada de alimentos al intestino, optimizando la digestión.
  • Saciedad: actúa como señal de plenitud, reduciendo el apetito.

Papel como neurotransmisor

En el sistema nervioso central, la colecistoquinina se libera en varias regiones, incluyendo el hipotálamo, amígdala e hipocampo. Allí contribuye a:

  • Modulación emocional: participa en el control de la ansiedad y del estado de ánimo.
  • Sensación de saciedad central: reforzando la señal de plenitud después de comer.
  • Control del dolor: influye en la tolerancia y respuesta a opioides.

Formas moleculares y receptores

Existen diferentes variantes según su número de aminoácidos (CCK‑8, CCK‑33, CCK‑58, etc.). Actúan sobre dos tipos de receptores:

  • CCKR1: presente principalmente en el páncreas y vías digestivas.
  • CCKR2: localizado en el sistema nervioso, vinculado a funciones emocionales y cognitivas.

Procesos que estimulan su liberación

Los principales estímulos para su secreción son:

  • Ácidos grasos y monoglicéridos procedentes de las grasas ingeridas.
  • Pequeños péptidos y aminoácidos derivados de proteínas.

Efectos en la digestión

La colecistoquinina asegura una digestión eficiente al coordinar varios procesos:

  1. Promueve digestión de grasas: a través de bilis y enzimas pancreáticas.
  2. Optimiza digestión de proteínas: al estimular enzimas proteolíticas.
  3. Retarda vaciado gástrico: favoreciendo procesos digestivos adecuados.

Influencia en saciedad y apetito

Actúa como clave neurohormonal del señalizador de saciedad: tras una comida, su concentración sube y envía señales al cerebro para frenar el apetito, regulado además por la conexión con nervio vago. Este efecto se mantiene durante aproximadamente 90 minutos.

Relación con obesidad y metabolismo

Estudios sugieren que ciertas variantes genéticas de colecistoquinina pueden influir en riesgo de obesidad y sensibilidad a señales de saciedad. En personas con obesidad severa, su efecto saciante puede estar atenuado, lo que disminuye su eficacia en controlar la ingesta.

Papel en enfermedad de Alzheimer y Parkinson

Investigaciones recientes han vinculado concentraciones elevadas de colecistoquinina con una menor incidencia de deterioro cognitivo y enfermedad de Alzheimer. También se investiga su papel neuroprotector en enfermedades como el Parkinson.

Uso clínico de la colecistoquinina

Se utiliza experimentalmente en pruebas como:

  • Pruebas pancreáticas: combinada con secretina para valorar función exocrina pancreática.
  • Prueba HIDA: para evaluar motilidad vesicular en estudios nucleares.

Efectos secundarios y contraindicaciones

La administración exógena puede producir:

  • Molestias gastrointestinales: náuseas, dolor abdominal o sensación de plenitud.
  • Reacciones adversas moderadas en estudios pancreáticos; requiere supervisión médica.

Cuándo acudir al médico

Se debe valorar en los siguientes casos:

  • Síntomas digestivos persistentes tras pruebas con colecistoquinina.
  • Dolor abdominal relacionado con vaciado gástrico alterado.
  • Alteraciones neurológicas sugerentes de afectación por neurohormonas.

Precauciones en su uso

Antes de administrar colecistoquinina, se debe tener en cuenta:

  • Historial de pancreatitis, ya que podría estimular más digestión en páncreas comprometido.
  • Enfermedad biliar activa sin tratamiento.
  • Afecciones cardiovasculares graves, debido al impacto digestivo intenso.

Preguntas frecuentes sobre colecistoquinina

¿Qué diferencia hay entre colecistoquinina y secretina?

La colecistoquinina actúa sobre vesícula y páncreas, mientras que la secretina estimula la producción de bicarbonato pancreático.

¿Puede afectar el apetito?

Sí, al aumentar después de la ingesta, indica saciedad y puede regular la ingesta energética.

¿Se usa como tratamiento contra la obesidad?

A pesar de su relación con saciedad, no se emplea clínicamente por falta de eficacia sostenida y posibles efectos adversos.

¿Implica riesgo en pruebas neurológicas?

El impacto en ansiedad o dolor puede existir, pero se monitorea bajo supervisión médica.

¿Puede interactuar con otros fármacos digestivos?

Sí, se debe valorar junto a inhibidores de la motilidad gástrica, enzimas pancreáticas y opiáceos.

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