DICCIONARIO MÉDICO

Circulación portal

Qué es circulación portal

La circulación portal es el sistema venoso responsable de transportar sangre rica en nutrientes desde el tracto gastrointestinal y el bazo hacia el hígado, mediante la vena porta hepática. Este mecanismo único permite que el hígado filtre y procese sustancias absorbidas antes de que accedan a la circulación sistémica.

Este circuito comienza en los capilares intestinales, donde los nutrientes digeridos ingresan al torrente sanguíneo, y concluye en el hígado, facilitando la metabolización de glucosa, grasas, proteínas, toxinas y fármacos.

Anatomía de la circulación portal

El sistema portal está compuesto por:

  • Vena porta hepática: formada por la unión de la vena mesentérica superior y la vena esplénica.
  • Venules portales: pequeñas venas que irrigan los sinusoides hepáticos en el hígado.
  • Sinusoides hepáticos: capilares especiales donde ocurre el intercambio con hepatocitos.
  • Vena hepática: recoge la sangre filtrada para llevarla a la vena cava inferior.

Fisiología y funciones esenciales

La circulación portal permite:

  • Filtrar toxinas y productos del metabolismo intestinal.
  • Regular la glucemia mediante extracción de glucosa.
  • Sintetizar proteínas plasmáticas como la albumina y factores de coagulación.
  • Modular el metabolismo de lípidos y colesterol.
  • Eliminación de fármacos y compuestos biliares.

Circulación portal en condiciones normales

Cuando funciona correctamente, mantiene presión baja (normal: 5‑10 mmHg), flujo estable y garantiza metabolización óptima de nutrientes y fármacos.

Alteraciones y patologías asociadas

La disfunción de este sistema puede desencadenar enfermedades graves:

  • Hipertensión portal: aumento de presión por cirrosis hepática o trombosis, causando varices esofágicas y ascitis.
  • Trombosis de vena porta: obstrucción aguda que produce dolor abdominal e hipertensión portal súbita.
  • Enfermedad de hígado graso no alcohólico: aumento del flujo porta contribuye a inflamación hepática.
  • Síndrome de Budd‑Chiari: obstrucción venosa hepática que desestabiliza la circulación portal.

Mecanismos compensatorios

En respuesta a una obstrucción, el cuerpo desarrolla:

  • Circulación colateral portal‑sistémica, con vasos como epigástricos y rectales.
  • Ascitis: acumulo de líquido peritoneal por presión elevada.
  • Esplenomegalia: congestión esplénica por aumento de presión venosa.

Diagnóstico de alteraciones

Se realiza mediante:

  • Ecografía Doppler hepática
  • Tomografía o resonancia abdominal
  • Endoscopia digestiva
  • Medición de gradiente venoso hepático

Cuándo acudir al médico

La consulta médica es necesaria si se detectan:

  • Distensión abdominal persistente o ascitis
  • Vomitos con sangre o melena
  • Ictericia progresiva
  • Dolor abdominal crónico

Prevención y cuidados

  • Evitar consumo excesivo de alcohol
  • Controlar peso y diabetes
  • Seguir tratamiento de hepatitis virales
  • Revisiones periódicas si existe cirrosis

Preguntas frecuentes sobre circulación portal

¿Cómo se mide la presión portal?

Mediante gradient venoso hepático invasivo, diferencial entre vena suprahepática y vena porta.

¿Qué son las varices esofágicas?

Vasos colaterales dilatados en esófago por hipertensión portal, riesgo de sangrado.

¿Puede revertirse la hipertensión portal?

La causa subyacente (cirrosis) puede mejorar con tratamiento, pero las complicaciones requieren manejo prolongado.

¿Influye la dieta en la circulación portal?

Sí. Dieta hiposódica y equilibrada ayuda a controlar ascitis y presión portal.

¿Es hereditaria la hipertensión portal?

No directamente, pero enfermedades que la causan (como hemocromatosis) sí pueden tener origen genético.

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