DICCIONARIO MÉDICO
Atimia
La atimia es un término médico y psicológico que hace referencia a la ausencia o disminución patológica de las emociones, especialmente en contextos donde se espera una reacción afectiva. Se considera un trastorno del área afectiva de la psique, en el que el paciente presenta una marcada indiferencia emocional frente a estímulos que normalmente generarían tristeza, alegría, miedo o afecto. Es un fenómeno que puede observarse en diversos trastornos mentales y neurológicos, especialmente en psicosis y trastornos neurodegenerativos. Aunque en ocasiones puede confundirse con otros cuadros clínicos como la apatía, la abulia o la anhedonia, la atimia tiene características propias. Se trata de una alteración profunda de la capacidad afectiva, y suele acompañarse de una disminución en la expresividad emocional, el contacto empático y la iniciativa emocional hacia los demás. Es importante señalar que la atimia no es una enfermedad en sí misma, sino un síntoma o manifestación clínica que forma parte de otras entidades diagnósticas. Su abordaje terapéutico depende del diagnóstico subyacente y de una evaluación integral del paciente. Los pacientes que presentan atimia pueden manifestar diferentes signos clínicos que afectan su funcionamiento psicoafectivo. Entre las características más representativas se incluyen: En algunos casos, estos pacientes pueden mostrarse funcionales a nivel cognitivo o motor, pero con una desconexión marcada del mundo emocional. Esto puede llevar a interpretaciones erróneas por parte del entorno, que percibe al paciente como frío, distante o apático. Es frecuente confundir la atimia con otros síntomas o síndromes que también afectan la esfera emocional. A continuación se describen las principales diferencias: La atimia, en cambio, se define por la pérdida global del contenido afectivo, tanto en su expresión como en su vivencia interna. La atimia suele aparecer en el contexto de trastornos mentales graves o enfermedades neurológicas avanzadas. Entre las condiciones más asociadas se encuentran: En los cuadros esquizofrénicos, especialmente en fases crónicas, la atimia es uno de los síntomas negativos predominantes. Se manifiesta como afectividad aplanada, ausencia de reacciones emocionales y desconexión interpersonal. Este grupo de demencias afecta los lóbulos frontales y temporales, responsables de la conducta social y la regulación afectiva. La atimia puede ser uno de los primeros signos, precediendo incluso a las alteraciones cognitivas más evidentes. Algunas personas con trastorno del espectro autista pueden presentar patrones de respuesta emocional atenuada o ausente, en particular en los subtipos más graves o con comorbilidades intelectuales. El uso crónico de sustancias psicoactivas, como alcohol, opiáceos o benzodiacepinas, puede alterar la química cerebral y suprimir la respuesta emocional, generando síntomas de atimia, especialmente durante fases de abstinencia o deterioro neurocognitivo. En las depresiones graves y de larga evolución, algunos pacientes pueden presentar una forma extrema de embotamiento afectivo que encaja con el cuadro clínico de la atimia, con ausencia de reactividad emocional incluso ante estímulos trágicos o alegres. Desde el punto de vista fisiopatológico, la atimia se asocia a disfunciones en áreas cerebrales involucradas en la regulación emocional, como: Las alteraciones estructurales (atrofia, lesiones) o funcionales (alteraciones de neurotransmisores como dopamina o serotonina) en estas regiones pueden provocar atimia. También se ha relacionado con una hipofrontalidad funcional, observada en estudios de neuroimagen en esquizofrenia y demencias. No existe una prueba específica para diagnosticar la atimia. La evaluación es clínica y requiere una valoración psiquiátrica y neurológica exhaustiva. Las herramientas diagnósticas suelen incluir: El diagnóstico diferencial debe establecerse con trastornos afectivos, del neurodesarrollo, o con simulaciones de indiferencia emocional por factores sociales o culturales. El tratamiento de la atimia no es específico, ya que depende de la causa subyacente. Sin embargo, algunas estrategias pueden ser útiles: La psicoterapia de apoyo, la estimulación emocional y el entrenamiento en habilidades sociales pueden ser útiles en pacientes que conservan capacidad de insight. Las terapias basadas en la mentalización o la terapia cognitivo-conductual adaptada también pueden ofrecer beneficios parciales. Se debe consultar con un profesional de salud mental si se observan en uno mismo o en un ser querido los siguientes signos: Ante un paciente con sospecha de atimia, se deben tener en cuenta ciertas consideraciones: Depende de la causa. En algunos casos, como depresiones tratables o efectos secundarios de fármacos, puede ser reversible. En cuadros neurodegenerativos o psicóticos crónicos, suele ser persistente. Es muy poco frecuente. En niños, una ausencia emocional prolongada podría deberse más probablemente a trastornos del espectro autista, trauma psicológico o privación afectiva. Se requiere valoración especializada. Sí, en muchas ocasiones la falta de expresividad emocional es malinterpretada como un rasgo de personalidad, cuando en realidad se trata de una alteración psicopatológica. Aunque pueden coexistir, no son lo mismo. La atimia implica ausencia emocional; la alexitimia, dificultad para identificarla o expresarla. Un paciente puede no sentir emociones (atimia) o no saber explicarlas (alexitimia). Provoca una desconexión emocional que puede dificultar gravemente las relaciones afectivas y sociales, generando incomprensión, aislamiento y conflictos familiares o laborales. © Clínica Universidad de Navarra 2025Qué es la atimia
Características clínicas de la atimia
Diferencias entre atimia y otros trastornos afectivos
Trastornos donde puede observarse atimia
Esquizofrenia
Demencias frontotemporales
Trastornos del espectro autista
Trastornos por consumo de sustancias
Trastornos depresivos mayores resistentes
Causas y mecanismos fisiopatológicos
Evaluación y diagnóstico
Tratamiento de la atimia
Intervención farmacológica
Psicoterapia
Estimulaciones no farmacológicas
Cuándo acudir al médico
Precauciones y recomendaciones
Preguntas frecuentes sobre la atimia
¿La atimia es reversible?
¿Puede un niño presentar atimia?
¿La atimia puede confundirse con frialdad de personalidad?
¿Existe relación entre atimia y alexitimia?
¿Cómo afecta la atimia a las relaciones interpersonales?