DICCIONARIO MÉDICO
Ampolla
Una ampolla, en el ámbito médico, es una lesión cutánea elevada, de contenido líquido claro o seroso, que se forma entre las capas más superficiales de la piel (epidermis y dermis). Su tamaño suele superar los 5 milímetros de diámetro, distinguiéndose así de las vesículas, que son más pequeñas. Estas formaciones se desarrollan como una respuesta del cuerpo ante diferentes tipos de agresión o alteraciones fisiopatológicas. Las ampollas pueden originarse por fricción repetida, quemaduras térmicas o químicas, enfermedades autoinmunes, infecciones o reacciones alérgicas. En medicina, su estudio es fundamental, no solo por su presentación clínica, sino también porque pueden ser signo de enfermedades dermatológicas graves que requieren intervención especializada. Las causas de aparición de ampollas son múltiples y se clasifican en función del mecanismo etiopatogénico que las origina: Una de las causas más frecuentes. El roce continuo entre la piel y una superficie, como el calzado o herramientas manuales, da lugar a la separación de las capas cutáneas con formación de líquido intersticial. Las quemaduras de segundo grado superficial generan ampollas, ya que la lesión térmica afecta la epidermis y parte de la dermis superficial, provocando extravasación de suero hacia el espacio intercelular. La exposición a sustancias corrosivas, como ácidos o álcalis, puede inducir ampollas al provocar daño directo sobre las estructuras cutáneas. Enfermedades ampollosas como el pénfigo vulgar o el penfigoide ampolloso se caracterizan por la presencia de autoanticuerpos que atacan componentes estructurales de la piel. Algunos fármacos pueden causar reacciones cutáneas graves como el síndrome de Stevens-Johnson o la necrólisis epidérmica tóxica, donde se forman ampollas extensas con desprendimiento de la piel. Las ampollas presentan características clínicas que orientan hacia su etiología: El diagnóstico se basa en la anamnesis detallada, exploración física y, en algunos casos, estudios complementarios como: El tratamiento depende de la causa subyacente: Las principales complicaciones derivadas de ampollas incluyen: Se recomienda consultar con un profesional sanitario si se presentan las siguientes situaciones: Algunas estrategias para prevenir la aparición de ampollas son: En general, no se recomienda romper una ampolla intacta, ya que la piel actúa como barrera protectora. Si es muy dolorosa, debe drenarse con técnica aséptica sin retirar la piel superior. Lavar con agua y jabón, aplicar un antiséptico y cubrir con apósito estéril. Es importante evitar infecciones secundarias. No. Muchas veces son consecuencia de causas físicas como el roce, pero si aparecen sin explicación o en zonas extensas, pueden ser signo de una patología sistémica. Solo en el caso de ampollas infecciosas como el herpes simple o impétigo. En esos casos, deben evitarse el contacto directo y compartir objetos. © Clínica Universidad de Navarra 2025Qué es una ampolla
Causas de aparición de ampollas
1. Fricción o presión mecánica
2. Quemaduras térmicas
3. Quemaduras químicas
4. Infecciones
5. Enfermedades autoinmunes
6. Reacciones medicamentosas o alérgicas
Características clínicas de las ampollas
Diagnóstico de las ampollas
Tratamiento de las ampollas
1. Ampollas por fricción
2. Ampollas por quemaduras
3. Ampollas infecciosas
4. Enfermedades ampollosas autoinmunes
Complicaciones posibles
Cuándo acudir al médico
Prevención de ampollas
Preguntas frecuentes sobre las ampollas
¿Debo pinchar una ampolla?
¿Qué hago si se me rompe una ampolla?
¿Las ampollas siempre indican una enfermedad?
¿Se contagian las ampollas?