La hipoxia nocturna por apneas de sueño empeora el pronóstico del cáncer de pulmón y del melanoma 

Una investigación multicéntrica nacional en la que participa el Cancer Center Clínica Universidad de Navarra ha encontrado biomarcadores asociados a una mayor actividad tumoral y una peor supervivencia

Imagen de miembros del equipo investigador sobre la hipoxia en cáncer de pulmón y melanoma de La Paz, el Cancer Center Clínica Universidad de Navarra y la Fundación Jiménez Diaz.
Miembros del equipo investigador. De izq. a dcha.: los Dres. Francisco García Río, de La Paz, Germán Peces Barba, de la Fundación Jiménez Díaz, Carolina Cubillos Zapata, de La Paz, Elena Díaz, de la Paz, y el Luis Seijo, del Cancer Center Clínica Universidad de Navarra. 

16 de junio de 2025

La hipoxia intermitente –disminución de oxígeno disponible para los tejidos del cuerpo- producida por las apneas de sueño altera el sistema inmunológico complicando el pronóstico de pacientes con tumores inmunogénicos, como el cáncer de pulmón y el melanoma. Un estudio multicéntrico, liderado por el Hospital Universitario La Paz y en el que participa el Cancer Center Clínica Universidad de Navarra, ha hallado unos biomarcadores que afectan al desarrollo y evolución de ambos tumores, y cuyos resultados se han publicado en la revista Archivos de Bronconeumología.  

La investigación estableció una asociación significativa entre las apneas del sueño y el cáncer de pulmón y la aparición de nódulos pulmonares en personas participantes en programas de cribado de este tumor. Como indica el Dr. Luis Seijo, director del Departamento de Neumología de la Clínica Universidad de Navarra y uno de los autores del estudio, “al investigar a qué se debe esa relación desde el punto de vista molecular, nos hemos encontrado unos biomarcadores de linfangiogenesis y de proliferación vascular que actúan como señales anticipando una evolución más desfavorable del cáncer”. 

Esta capacidad de alterar el sistema inmunológico del paciente ha provocado a su vez que personas con melanoma -un cáncer donde la respuesta inmunitaria también juega un papel importante-, puedan tener un pronóstico más complejo. “Normalmente, el melanoma aparece por exposición al sol y por mutaciones causadas por el daño de la radiación solar, pero es posible que la hipoxia intermitente genere un ambiente donde ese daño prospera o, si hay un tumor establecido, prolifere con más agresividad”, añade el Dr. Seijo.  

Peor supervivencia y más mortalidad 

Estos biomarcadores no solo reflejan una mayor actividad tumoral, sino que también se asocian con una peor supervivencia y mayor mortalidad. Su detección se llevó a cabo en el grupo de enfermedades respiratorias del Instituto de Investigación del Hospital La Paz (IdiPAZ). Los hallazgos hasta ahora indican que ese bajo nivel de oxígeno en sangre en estos pacientes influye en el aumento de puntos de control inmunológico (inmunocheckpoints), lo que favorece el progreso tumoral y la evasión del sistema inmune. En concreto, Galectina-9 y TIM-3 son biomarcadores de pronóstico prometedores para la supervivencia a medio y largo plazo en pacientes con apnea del sueño y melanoma o cáncer de pulmón

El siguiente paso del equipo investigador será determinar qué ocurre al tratar las apneas de sueño mediante la CPAP (tratamiento de elección que usa presión de aire leve para mantener las vías respiratorias abiertas al dormir). Para ello, buscan poner en marcha un nuevo estudio con pacientes con cáncer de pulmón en estadios iniciales, cuyo tratamiento oncológico principal es la cirugía, y con apneas de sueño para observar si con la CPAP se modifican los niveles de biomarcadores antes y después de la cirugía y del abordaje terapéutico respiratorio. “El objetivo es ver si se mitigan también el riesgo de recidiva y la mortalidad de estos tumores al reducir esos biomarcadores”, concluye el Dr. Seijo.