Dolor

"El grado del dolor varía de persona a persona. Por eso, su plan de tratamiento se diseña de acuerdo a sus necesidades y circunstancias específicas".

DR. NICOLÁS VARELA
DIRECTOR. ÁREA DEL DOLOR

El dolor es subjetivo, y la diferencia con el sufrimiento es que este es la tolerancia al dolor.

Para valorar el dolor hay que conocer sus características para que el especialista indique el mejor tratamiento.

La escala numérica del dolor lo cuantifica del 0 al 10 como si fuera una constante vital más, según la percepción del paciente sobre su intensidad. 

Si el dolor se mantiene más de 3-6 meses, se considera crónico y requiere tratamiento. El 90% del dolor crónico se puede aliviar y los resultados son muy satisfactorios.

¿Cuáles son los tipos de dolor?

Dolor somático
Causado por la activación de los receptores del dolor en la piel, tejido subcutáneo, músculo y hueso. Es un dolor bien localizado y se describe como agudo.

Responde a los analgésicos habituales, incluidos los antiinflamatorios, los opiáceos, incluso la morfina y sus derivados. Dolor visceral: está causado por la distensión de la capas que rodean un órgano visceral. Es un dolor tipo cólico y aumenta con la palpación.

Dolor neuropático
Está causado por una lesión en el sistema nervioso. Suele ser como de quemazón, ardor, punzante o lacerante.

Puede llegar a ser muy molesto, no responde a los analgésicos que conoce y, sin embargo, mejora con fármacos que a primera vista no están relacionados, como son algunos antidepresivos y fármacos empleados en la epilepsia, en el tratamiento de arritmias cardiacas, etc., porque estabilizan las membranas nerviosas alteradas.

Dolor visceral
Provocado por la distensión de las capas que rodean un órgano visceral. Es un dolor tipo cólico y aumenta con la palpación.

Por otro lado, el dolor se puede clasificar en agudo o crónico, según su duración:

  • El dolor agudo se considera cuando dura menos de 1 mes.
  • El dolor crónico es aquel que dura más de 3 meses.

¿Tiene alguno de estos síntomas?

Puede que sea necesario realizar una valoración de su dolor

¿Cómo se diagnostica la causa del dolor?

Imagen de una fractura vertebral. Clínica Universidad de Navarra

El diagnóstico se realiza a través de la historia clínica y la exploración física. Son claves para un correcto diagnóstico del dolor neuropático.

Además, el diagnóstico puede complementarse con pruebas como velocidades de conducción de nervio, electromielogramas y diversos estudios de imágenes, incluyendo escáner, mielograma y resonancia magnética.

Una prueba diagnóstica adicional para determinar la involucración posible de hiperactividad simpática es el test de fentolamina.

¿Cómo se trata el dolor? La escalera analgésica

Analgésicos menores:

  • Antiinflamatorios.
  • Paracetamol.

No producen resistencia ni adicción. Más dosis no aumentan la analgesia y sí los efectos secundarios.

Indicados en dolor oncológico leve/moderado. Se pueden asociar a fármacos adyuvantes.

Cuando el anterior escalón no alivia el dolor.

  • Codeína: derivado de la morfina con menor potencia analgésica para el dolor leve/moderado. No produce dependencia. Efectos secundarios: náuseas, vómitos, mareo y estreñimiento.
  • Dihidrocodeína: derivado de la codeína con acciones similares.
  • Tramadol: acción central. Efecto equivalente al de la morfina oral de liberación lenta en dolores de intensidad moderada.

Opiáceos mayores.

Morfina: indicada contra el dolor y la disnea (dificultad respiratoria) en el paciente oncológico.

Fármacos coadyuvantes

  • Anticonvulsivantes (carbamazepina, clonacepan, gabapentina, fenitoína y valproato). Muy eficaces para el dolor neuropático
  • Antidepresivos tricíclicos para las disestesias (sensación dolorosa por un estímulo que no debiera serlo)
  • Los esteroides (dexametasona y la prednisolona) son efectivos para el dolor óseo, cefalea por hipertensión craneal, compresión medular o de nervio periférico.

Tratamientos no farmacológicos: relajación, hábitos posturales, posturas antiálgicas y aparatos que con masaje, ondas o corriente eléctrica reducen la inflamación o las contracturas originadas por el dolor, disminuyendo su intensidad.

Tratamientos para dolores rebeldes, localizados que deben realizarse en centros especializados:

  • Infiltraciones.
  • Iontoforesis con medicación por calor (radiofrecuencia) o frío (crioanalgesia).
  • Bloqueos epidurales.
  • Bloqueos periféricos.
  • Aparatos implantados, a modo de prótesis, pero que no se perciben, como los estimuladores epidurales.
  • Sistemas de infusión de fármacos en zonas próximas a la médula.

Son procesos reversibles y sus efectos secundarios pequeños.

Cuando todo esto no resulta, algunas intervenciones neuroquirúrgicas disminuyen la sensibilidad nerviosa.

¿Dónde lo tratamos?

EN NAVARRA Y MADRID

El Área del Dolor
de la Clínica Universidad de Navarra

El objetivo de los especialistas del Área del Dolor de la Clínica es ofrecer a los pacientes un manejo completo e individualizado del dolor para conseguir mejorar su calidad de vida.

La dedicación de sus profesionales permite establecer un diagnóstico y un plan de actuación en 24 horas para que el paciente comience su tratamiento en la mayor brevedad posible.

Tratamientos

  • Bloqueos epidurales
  • Bloqueos periféricos
  • Bombas intratecales
  • Estimuladores medulares
  • Perfusión de lidocaína
  • Radiofrecuencia
Imagen de la fachada de consultas de la sede en Pamplona de la Clínica Universidad de Navarra

¿Por qué en la Clínica?

  • Anestesistas especializados y formados en centros internacionales.
  • Técnicas avanzadas para controlar dolores difíciles.
  • Enfermería especializada en el manejo y seguimiento del paciente con dolor.