DICCIONARIO MÉDICO

Nefritis lúpica

La nefritis lúpica es una complicación grave del lupus eritematoso sistémico (LES), una enfermedad autoinmune crónica que puede afectar múltiples órganos y tejidos. En la nefritis lúpica, el sistema inmunológico ataca los riñones, causando inflamación y daño en las estructuras renales, particularmente los glomérulos. Esta condición puede llevar a una disminución significativa de la función renal y, en casos severos, a insuficiencia renal. El diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado son fundamentales para preservar la salud renal y mejorar la calidad de vida de los pacientes.

Qué es nefritis lúpica

La nefritis lúpica es una manifestación renal del lupus eritematoso sistémico, que ocurre en aproximadamente el 60% de los pacientes con LES. Esta enfermedad se caracteriza por la inflamación de los glomérulos, las unidades filtrantes de los riñones, debido a la acumulación de complejos inmunes que desencadenan una respuesta inflamatoria. Dependiendo de la gravedad del daño renal, la nefritis lúpica se clasifica en seis clases según los criterios de la Sociedad Internacional de Nefrología (ISN) y la Sociedad de Patología Renal (RPS).

Tipos de nefritis lúpica

La clasificación de la nefritis lúpica según ISN/RPS se basa en los hallazgos de la biopsia renal:

  • Clase I: Nefritis lúpica mesangial mínima, con pocos cambios visibles al microscopio.
  • Clase II: Nefritis lúpica mesangial proliferativa, con aumento de células mesangiales.
  • Clase III: Nefritis lúpica focal, con afectación de menos del 50% de los glomérulos.
  • Clase IV: Nefritis lúpica difusa, afectando más del 50% de los glomérulos y generalmente asociada a peor pronóstico.
  • Clase V: Nefritis lúpica membranosa, caracterizada por depósitos inmunes en la membrana basal.
  • Clase VI: Nefritis lúpica esclerosante avanzada, con daño irreversible en la mayoría de los glomérulos.

Síntomas de la nefritis lúpica

Los síntomas de la nefritis lúpica pueden variar según la gravedad de la enfermedad y pueden incluir:

  • Hinchazón en extremidades inferiores o alrededor de los ojos.
  • Aumento de peso debido a la retención de líquidos.
  • Orina espumosa por la presencia de proteínas.
  • Orina con sangre o decoloración oscura.
  • Presión arterial elevada.
  • Fatiga y malestar general.

Causas de la nefritis lúpica

La nefritis lúpica es causada por la acumulación de complejos inmunes en los riñones, lo que desencadena una respuesta inflamatoria. Los factores que contribuyen al desarrollo de esta condición incluyen:

  • Factores genéticos: Predisposición genética asociada a ciertos genes relacionados con la respuesta inmune.
  • Factores ambientales: Exposición a infecciones, luz ultravioleta o ciertos medicamentos.
  • Alteraciones inmunológicas: Disfunción en la regulación del sistema inmunológico que provoca inflamación crónica.

Diagnóstico de la nefritis lúpica

El diagnóstico de la nefritis lúpica incluye varias pruebas y procedimientos:

  • Análisis de orina: Para detectar proteínas, glóbulos rojos o cilindros celulares.
  • Pruebas sanguíneas: Evaluación de niveles de creatinina, complemento y anticuerpos antinucleares (ANA).
  • Biopsia renal: Para confirmar el diagnóstico y determinar la clasificación de la nefritis lúpica.
  • Imagenología: Ecografía renal para evaluar el tamaño y la estructura de los riñones.

Tratamiento de la nefritis lúpica

El tratamiento de la nefritis lúpica se enfoca en reducir la inflamación y preservar la función renal. Las opciones incluyen:

  • Corticosteroides: Para reducir la inflamación.
  • Inmunosupresores: Ciclofosfamida, micofenolato mofetilo o azatioprina para controlar la actividad inmunológica.
  • Antimaláricos: Hidroxicloroquina para prevenir recaídas del lupus.
  • Tratamientos dirigidos: Belimumab, un inhibidor de la proteína estimuladora de linfocitos B.
  • Control de comorbilidades: Tratamiento de hipertensión, dislipidemia y diabetes si están presentes.

Cuándo acudir al médico

Es importante buscar atención médica si se presentan los siguientes síntomas:

  • Hinchazón persistente en extremidades o cara.
  • Cambios en el color o cantidad de la orina.
  • Fatiga extrema y debilidad.
  • Aumento de la presión arterial.

Preguntas frecuentes sobre nefritis lúpica

¿La nefritis lúpica es reversible?

Con tratamiento temprano y adecuado, es posible controlar la inflamación y preservar la función renal, aunque el daño avanzado puede ser irreversible.

¿Qué factores empeoran la nefritis lúpica?

El estrés, infecciones no tratadas, exposición solar excesiva y la falta de adherencia al tratamiento pueden agravar la enfermedad.

¿Se puede prevenir la nefritis lúpica?

Aunque no se puede prevenir completamente, el control adecuado del lupus eritematoso sistémico y las visitas regulares al médico pueden reducir el riesgo de nefritis lúpica.

¿La nefritis lúpica requiere diálisis?

En casos graves donde la insuficiencia renal es significativa, puede ser necesario recurrir a diálisis como parte del tratamiento.

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