DICCIONARIO MÉDICO
Gliosarcoma
El gliosarcoma es un tipo raro y agresivo de tumor cerebral que combina componentes gliales y sarcomatosos. Se considera una variante del glioblastoma multiforme (GBM), clasificado como grado IV según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Aunque representa menos del 2% de los gliomas, su naturaleza dual lo distingue de otros tumores cerebrales, complicando su manejo clínico y pronóstico. El gliosarcoma se origina en el sistema nervioso central (SNC) y afecta principalmente a adultos de mediana edad y ancianos. Su comportamiento es altamente invasivo, con un crecimiento rápido y una alta probabilidad de recidiva tras el tratamiento. Dada su rareza, su diagnóstico y tratamiento requieren un enfoque multidisciplinario. El gliosarcoma presenta características distintivas que lo diferencian de otros tumores cerebrales: La causa exacta del gliosarcoma no se conoce por completo, pero su desarrollo se relaciona con una serie de factores genéticos y moleculares. Se cree que surge a partir de la transformación maligna de un glioblastoma preexistente. El gliosarcoma comparte alteraciones genéticas comunes con el glioblastoma. Entre las principales mutaciones implicadas se encuentran: La característica distintiva del gliosarcoma es la presencia de un componente sarcomatoso, que surge probablemente de la transformación de células gliales malignas hacia un fenotipo mesenquimal. Este fenómeno se asocia con mecanismos de transición epitelio-mesenquimal y alteraciones en las vías de señalización celular. Los síntomas del gliosarcoma dependen de su localización, tamaño y grado de invasión en el tejido cerebral. Entre los síntomas más frecuentes se incluyen: El diagnóstico del gliosarcoma requiere un enfoque integral que incluye evaluación clínica, estudios de imagen y análisis histopatológico. Las pruebas de imagen son fundamentales para la identificación de la masa tumoral y la planificación del tratamiento: El diagnóstico definitivo se realiza mediante análisis histopatológico, que revela: El tratamiento del gliosarcoma sigue un enfoque multidisciplinario que combina cirugía, radioterapia y quimioterapia, similar al manejo del glioblastoma. La resección quirúrgica completa es el primer paso en el manejo del gliosarcoma. El objetivo es eliminar la mayor cantidad de tejido tumoral posible, lo que puede mejorar los síntomas y la supervivencia. La radioterapia postoperatoria es esencial para controlar el crecimiento residual del tumor y reducir el riesgo de recidiva. La temozolomida es el agente quimioterápico de elección, utilizado de manera adyuvante junto con radioterapia. Sin embargo, la eficacia de la quimioterapia en el gliosarcoma puede ser limitada debido a su heterogeneidad celular. El pronóstico del gliosarcoma es reservado debido a su naturaleza agresiva y alta tasa de recidiva. La supervivencia media es de aproximadamente 12 a 18 meses, similar a la del glioblastoma multiforme. Factores que influyen en el pronóstico incluyen: © Clínica Universidad de Navarra 2023Características generales del gliosarcoma
Etiología y patogénesis del gliosarcoma
Factores genéticos y moleculares
Transformación sarcomatosa
Manifestaciones clínicas
Diagnóstico del gliosarcoma
Neuroimagen
Histopatología
Tratamiento del gliosarcoma
Cirugía
Radioterapia
Quimioterapia
Pronóstico del gliosarcoma