DICCIONARIO MÉDICO

Cistostomía

Qué es cistostomía

La cistostomía es un procedimiento quirúrgico que consiste en la creación de una abertura directa en la vejiga urinaria a través de la pared abdominal con el objetivo de drenar la orina. Esta intervención se realiza cuando no es posible o recomendable utilizar la vía natural para evacuar la orina a través de la uretra. La abertura puede ser temporal o permanente, y permite colocar un catéter suprapúbico que facilita la salida de la orina hacia una bolsa colectora externa.

Se trata de una técnica habitual en situaciones clínicas complejas, como obstrucciones uretrales, enfermedades neurológicas que impiden el vaciado vesical adecuado, intervenciones urológicas específicas o lesiones del tracto urinario inferior. La cistostomía proporciona una solución segura y eficaz para preservar la función renal y evitar complicaciones infecciosas.

Indicaciones médicas de la cistostomía

La indicación de una cistostomía responde generalmente a la necesidad de asegurar una correcta eliminación de la orina cuando la vía uretral está comprometida o no resulta adecuada. Las situaciones más frecuentes en las que se indica son:

  • Obstrucción uretral por hiperplasia benigna de próstata, estenosis, cálculos o tumores.
  • Lesiones traumáticas del aparato genitourinario inferior que impiden la colocación de una sonda uretral.
  • Enfermedades neurológicas como la esclerosis múltiple, lesiones medulares o vejiga neurógena.
  • Pacientes con inmovilidad grave o cuidados paliativos que requieren drenaje urinario crónico.
  • Cirugías urológicas complejas en las que es necesario derivar la orina durante el posoperatorio.

Técnicas quirúrgicas utilizadas

Existen distintas formas de realizar una cistostomía, dependiendo de la urgencia, las condiciones del paciente y los recursos disponibles. Las principales técnicas son:

  • Cistostomía percutánea: procedimiento mínimamente invasivo que se realiza con control ecográfico. Se introduce un catéter a través de una aguja directamente en la vejiga.
  • Cistostomía quirúrgica abierta: indicada cuando la vía percutánea no es viable. Implica una incisión quirúrgica suprapúbica bajo anestesia.
  • Colocación guiada por imagen: en pacientes de riesgo, se puede realizar con ayuda de control por tomografía computarizada o fluoroscopia.

Tipos de cistostomía

La clasificación puede realizarse en función del tiempo de permanencia o de la técnica empleada:

  • Temporal: utilizada en situaciones reversibles, como cirugías urológicas o infecciones agudas.
  • Permanente: indicada en pacientes con daño neurológico irreversible o enfermedades que impiden la micción voluntaria.
  • De urgencia: colocada en un contexto agudo, como una retención urinaria grave.
  • Programada: realizada de forma electiva en un entorno quirúrgico planificado.

Cuidados posteriores a la cistostomía

El correcto mantenimiento del catéter y del estoma es fundamental para evitar infecciones urinarias, bloqueos del catéter o irritación cutánea. Los cuidados incluyen:

  1. Higiene diaria de la piel alrededor del estoma con agua tibia y jabón neutro.
  2. Revisión del catéter para detectar obstrucciones, fugas o desplazamientos.
  3. Hidratación adecuada para favorecer la producción de orina y reducir el riesgo de infecciones.
  4. Cambios periódicos del catéter, según indicación médica, generalmente cada 4-6 semanas.

Complicaciones posibles

Aunque en general es un procedimiento seguro, pueden aparecer algunas complicaciones que requieren atención médica:

  • Infección urinaria o del tracto urinario superior (pielonefritis).
  • Obstrucción del catéter por sedimentos o coágulos.
  • Extravasación de orina al tejido subcutáneo si el catéter se desplaza.
  • Lesiones vesicales o sangrado.
  • Infección del sitio de entrada, con enrojecimiento, secreción o dolor local.

Ventajas frente a otros métodos de derivación urinaria

Comparada con la sonda uretral, la cistostomía presenta varias ventajas en pacientes con indicación específica:

  • Menor riesgo de uretritis o de lesión uretral.
  • Mejor tolerancia en periodos prolongados de uso.
  • Mayor comodidad para el paciente con movilidad reducida.
  • Facilita cuidados domiciliarios en pacientes crónicos.

Contraindicaciones

Existen algunas situaciones clínicas en las que la realización de una cistostomía puede estar contraindicada o requerir precauciones especiales:

  • Trastornos de la coagulación no corregidos.
  • Infección activa en la pared abdominal donde se colocaría el catéter.
  • Vejiga no distendida, que dificulta el acceso seguro en técnicas percutáneas.

Cuándo acudir al médico

Es importante consultar con el especialista o acudir a un servicio de urgencias si se presentan los siguientes síntomas tras la colocación de una cistostomía:

  • Fiebre superior a 38 °C o escalofríos.
  • Dolor intenso en la zona del estoma o el abdomen.
  • Sangrado persistente por la orina o el sitio de entrada.
  • Obstrucción del catéter o ausencia de orina en la bolsa colectora.
  • Secreción purulenta o mal olor en el área del estoma.

Precauciones y recomendaciones generales

Además de los cuidados habituales, conviene seguir estas recomendaciones para garantizar una buena evolución del paciente con cistostomía:

  • Evitar manipular el catéter sin higiene previa adecuada.
  • Registrar el volumen de orina emitido diariamente si lo indica el especialista.
  • Utilizar ropa cómoda que no ejerza presión sobre el estoma.
  • Asistir a las revisiones médicas programadas para control y cambio del catéter.

Preguntas frecuentes sobre la cistostomía

¿Puedo bañarme o ducharme si tengo una cistostomía?

Sí, en la mayoría de los casos es posible ducharse siempre que se sigan las recomendaciones del equipo sanitario. Es importante secar bien la zona del estoma y evitar productos irritantes o agresivos en esa área.

¿La cistostomía es dolorosa?

El procedimiento se realiza con anestesia local o general, por lo que no se siente dolor durante la intervención. En los días posteriores puede haber molestias leves que se controlan con analgésicos convencionales.

¿Se puede practicar deporte con una cistostomía?

Dependerá del tipo de actividad y del estado clínico del paciente. En general se recomienda evitar deportes de contacto o que impliquen movimientos bruscos del abdomen. Actividades suaves como caminar suelen estar permitidas.

¿La cistostomía afecta a la vida sexual?

Puede influir dependiendo del tipo de relación y la comodidad del paciente. Es recomendable hablar con el especialista para resolver dudas y valorar el uso de dispositivos o posiciones que reduzcan la incomodidad.

¿Cómo saber si el catéter está funcionando correctamente?

Debe observarse un flujo continuo de orina hacia la bolsa. Si hay interrupciones, disminución del volumen o signos de infección, se debe contactar con el personal sanitario.

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