Radioterapia de precisión durante la cirugía: más eficacia y menos toxicidad
La Clínica Universidad de Navarra es el primer hospital privado español que ha adquirido un acelerador lineal miniaturizado para administrar radioterapia intraoperatoria: LIAC, el modelo más versátil, de menor tamaño y mayor movilidad
30 de julio de 2018
Un acelerador lineal móvil y miniaturizado (LIAC) para administrar radioterapia con la máxima exactitud durante la misma cirugía de extirpación del tumor es la adquisición más innovadora del nuevo equipamiento de oncología radioterápica de la sede de la Clínica Universidad de Navarra en Madrid.
El LIAC permite tratar pacientes más complejos reduciendo a mínimos el nivel de toxicidad en los tejidos sanos adyacentes, en menos sesiones y de forma más segura. El tiempo de exposición a la radiación no supera los dos minutos, ya que el acelerador posibilita "una dosis muy elevada y homogénea, en una zona muy concreta y en una única sesión", subraya el Dr. Felipe Calvo, codirector de Oncología Radioterápica de la Clínica Universidad de Navarra. De hecho, se estima que una sola sesión de este acelerador equivale a seis de radioterapia convencional.
A este nuevo equipo se le suma un acelerador lineal Elekta Versa de última generación para administrar radioterapia externa y equipos de braquiterapia (de carga diferida por control remoto) como principales adquisiciones de tecnología radioterápica de la Clínica en Madrid.
La nueva tecnología se ha ubicado en un edificio especialmente construido para albergar los diversos tratamientos radioterápicos para pacientes con cáncer. En conjunto, una inversión de más de 6 millones de euros para ofrecer radioterapia de máxima precisión. Un concepto que, según define el Dr. Calvo, se concreta “en la incorporación de sistemas que permiten administrar dosis curativas en la zona de riesgo, según las características de cada paciente y minimizar la radiación en de los tejidos sanos adyacentes”.
Los nuevos equipamientos de la sede de Madrid se añaden así a las dotaciones de radioterapia ya existentes en el centro de Pamplona: dos aceleradores lineales (un Elekta Versa y un Siemens Oncor) para procedimientos de radioterapia externa y diferentes equipos de braquiterapia, para administrar radioterapia interna mediante un equipo de carga diferida por control remoto y semillas radiactivas que pueden implantarse directamente en el tumor de forma temporal o permanente mediante cirugía.
Radioterapia en quirófano: principales indicaciones
La novedad más destacada de los nuevos equipos incorporados en Madrid es el acelerador de electrones, móvil, configurado para uso intraoperatorio, de última generación que administra radioterapia durante la cirugía de extirpación del tumor.
Se trata del equipo LIAC, de la firma Sordina, un modelo de acelerador lineal miniaturizado indicado para trabajar en quirófanos oncológicos. Administra dosis de radiación muy seguras. A día de hoy este es el modelo de menor tamaño, más ligero y con mayor movilidad que existe en los hospitales privados españoles. “Es el que proporciona mayor versatilidad en un espacio tan exigente como es un quirófano oncológico”, destaca el Dr. Calvo.
Esta modalidad de radioterapia intraoperatoria se realiza mediante la administración de haces de electrones (IOERT-Intraoperative Electron Radiation Therapy) sobre los tumores que inicialmente no se pueden extirpar (irresecables). También se aplica en tumores resecados (extirpados) pero con restos residuales y en aquellos ya extirpados pero con un diagnóstico de alto riesgo de recidiva en el lecho quirúrgico.
“Se trata de una radioterapia guiada en las mejores condiciones posibles ya que el oncólogo radioterápico tiene visión directa del área de riesgo. Es una radioterapia guiada anatómicamente por la visión del campo quirúrgico y el desplazamiento temporal, que permite proteger, fuera del haz de electrones, los órganos y estructuras no afectados por el tumor”, describe el Dr. Felipe Calvo.
Innovación y personalización
El tratamiento radioterápico de los pacientes en la Clínica se realiza de forma diferencial. “Nuestro equipo profesional se distingue por tratar de forma interdisciplinar a cada paciente y por aportar toda la innovación tecnológica y farmacológica para obtener una asistencia personalizada. Buscamos los factores distintivos de cada paciente para adaptarle las terapias a esos rasgos personales. El tratamiento oncológico está enfocado a integrar ambos aspectos”, destaca el Dr. Calvo.
El nuevo equipamiento tecnológico recién adquirido permite así optimizar el tratamiento radioterápico. “La tecnología innovadora posibilita el estudio de otras alternativas de tratamiento, diferentes planes dosimétricos y de irradiación para seleccionar el que mejor se adapta a la anatomía de esa persona que vamos a tratar, a su edad, a la agresividad tumoral que presenta, a su comorbilidad y a sus tejidos sanos. A todos esos factores debe obedecer la optimización”, detalla el especialista.
Las nuevas instalaciones de radioterapia están dirigidas a diferentes tipos de pacientes oncológicos: pacientes ambulatorios en tratamiento activo y a pacientes en evaluación, tanto en primera consulta como en revisiones de seguimiento. Además, en el mismo inmueble se ubican las dependencias destinadas al Servicio de Radiofísica, con equipamiento de vanguardia para la planificación personalizada de los tratamientos y avanzados sistemas de calibración.