DICCIONARIO MÉDICO
Carina
La carina traqueal, también llamada simplemente carina, es una estructura anatómica ubicada en el sistema respiratorio, concretamente en la parte inferior de la tráquea, donde esta se divide en los dos bronquios principales (derecho e izquierdo). Tiene forma de cresta o espolón cartilaginoso y está recubierta por una mucosa altamente sensible que participa en los reflejos de protección de las vías respiratorias, como el reflejo de la tos. Anatómicamente, la carina se localiza aproximadamente a nivel de la quinta vértebra torácica (T5), aunque esta posición puede variar ligeramente dependiendo de factores como la postura corporal o la fase respiratoria. La carina cumple un papel fundamental en la bifurcación del aire inhalado hacia los pulmones, pero además tiene otras funciones fisiológicas relevantes: La carina divide la tráquea en los bronquios principales, facilitando que el aire se dirija a cada pulmón. El bronquio derecho suele ser más corto, ancho y vertical, lo que explica que cuerpos extraños aspirados se alojen con mayor frecuencia en él. Debido a la hipersensibilidad de su mucosa, la carina actúa como una zona desencadenante del reflejo tusígeno. Al ser estimulada por secreciones, cuerpos extraños o irritantes, genera una tos refleja para proteger las vías respiratorias inferiores. Durante técnicas como la intubación endotraqueal, la visualización de la carina es fundamental para confirmar la correcta colocación del tubo en la tráquea y evitar su introducción accidental en un solo bronquio. La carina se encuentra en el mediastino inferior medio, rodeada por estructuras vasculares, linfáticas y pulmonares importantes. Aunque la carina no es una estructura patológica en sí misma, puede verse afectada directa o indirectamente por diversas condiciones clínicas, algunas de las cuales requieren atención médica urgente o especializada. Tumores broncopulmonares o mediastínicos pueden invadir o comprimir la carina, provocando tos persistente, obstrucción bronquial, disnea o hemoptisis. La afectación de la carina es considerada un criterio de inoperabilidad en muchos casos de cáncer pulmonar. La carina es un punto crítico donde pueden impactarse objetos aspirados. Su estimulación brusca genera un reflejo de tos violento que, en ocasiones, logra expulsar el cuerpo extraño. En enfermedades como bronquitis crónica o asma, la carina puede estar constantemente irritada, generando tos seca y persistente. En procesos como sarcoidosis, linfoma o tuberculosis, el aumento de tamaño de los ganglios linfáticos traqueobronquiales puede comprimir o desplazar la carina, detectándose en pruebas de imagen o durante una broncoscopia. El estudio de la carina se realiza principalmente mediante pruebas de imagen y técnicas endoscópicas. En muchos casos, las alteraciones de esta estructura son hallazgos secundarios durante la evaluación de síntomas respiratorios. La carina está implicada en múltiples procedimientos médicos y quirúrgicos. Su correcta identificación y preservación son esenciales en intervenciones torácicas. Durante la intubación, es crucial asegurar que el tubo endotraqueal no se introduzca más allá de la carina, lo que produciría ventilación selectiva de un pulmón y colapso del otro. En procedimientos como neumonectomías o resecciones traqueales, la posición de la carina es un referente anatómico clave. La resección carinal es técnicamente compleja y conlleva riesgos elevados. Permite realizar biopsias de carina o masas cercanas, colocar stents en caso de obstrucción y realizar drenajes terapéuticos si hay compresión extrínseca. Se recomienda acudir a valoración médica si se presentan síntomas compatibles con alteraciones en la carina o estructuras vecinas, especialmente si se trata de: Dado que la carina puede estar implicada en patologías graves, es importante realizar seguimiento clínico y radiológico en pacientes con antecedentes respiratorios, tabaquismo o enfermedades neoplásicas. La detección precoz de alteraciones puede mejorar significativamente el pronóstico. En procedimientos invasivos, la identificación de la carina es una medida de seguridad para evitar complicaciones como ventilación selectiva, atelectasias o perforaciones. No. La carina es una estructura cartilaginosa recubierta de mucosa, no tiene función contráctil ni actúa como válvula. El desplazamiento de la carina suele indicar la presencia de masas, adenopatías o colapso pulmonar. Es un hallazgo radiológico que requiere estudio. Depende de la causa y gravedad. Algunas lesiones inflamatorias son reversibles. Otras, como las tumorales invasivas, pueden requerir cirugía y tratamiento oncológico. Los síntomas más comunes son tos intensa, dificultad respiratoria, dolor torácico y en casos graves, hemoptisis. La evaluación de la carina puede realizarla un neumólogo, otorrinolaringólogo o cirujano torácico, dependiendo del contexto clínico. © Clínica Universidad de Navarra 2025Qué es la carina
Funciones de la carina
1. Distribución del flujo aéreo
2. Participación en el reflejo de la tos
3. Marcador anatómico durante procedimientos médicos
Relaciones anatómicas de la carina
Estructuras próximas
Patologías relacionadas con la carina
1. Invasión tumoral
2. Cuerpos extraños
3. Inflamación e irritación crónica
4. Linfadenopatías mediastínicas
Exploración clínica y diagnóstico
Pruebas diagnósticas habituales
Procedimientos médicos relacionados con la carina
1. Intubación endotraqueal
2. Cirugía torácica
3. Broncoscopia intervencionista
Cuándo acudir al médico
Precauciones clínicas y seguimiento
Preguntas frecuentes sobre la carina
¿La carina es una válvula o un músculo?
¿Qué significa que la carina esté desplazada?
¿Se puede vivir con una lesión en la carina?
¿Qué síntomas produce un problema en la carina?
¿Qué especialista evalúa la carina?