Vancomicina

¿Qué es la vancomicina?

Antibiótico glucopéptido de administración intravenosa. Puede producir toxicidad renal y auditiva y el denominado síndrome de cuello rojo, relacionado con la perfusión rápida.

La vancomicina es un antibiótico utilizado en el tratamiento de infecciones bacterianas graves, especialmente aquellas causadas por bacterias resistentes a otros antibióticos. Pertenece a la clase de antibióticos glucopéptidos y actúa inhibiendo la síntesis de la pared celular bacteriana.

La vancomicina se administra por vía intravenosa y se utiliza en el tratamiento de infecciones graves como la endocarditis, la neumonía, la osteomielitis y la sepsis. También se puede utilizar para prevenir infecciones en pacientes que están bajo cirugía o en pacientes con un sistema inmunológico debilitado.

Es importante destacar que la vancomicina es un antibiótico de última línea debido a que el uso excesivo y/o inapropiado puede provocar resistencia bacteriana, lo que dificulta el tratamiento de infecciones en el futuro.

En cuanto a los efectos secundarios, la vancomicina puede causar reacciones alérgicas, daño renal y ototoxicidad (daño en el oído interno). Por esta razón, se deben realizar pruebas de función renal y audición antes y durante el tratamiento con vancomicina.

Es esencial seguir las recomendaciones del médico en cuanto a dosis, frecuencia y duración del tratamiento con vancomicina, así como informar sobre cualquier efecto secundario o síntoma de infección persistente durante o después del tratamiento.

En resumen, la vancomicina es un antibiótico de última línea utilizado en el tratamiento de infecciones bacterianas graves. Su uso adecuado es esencial para prevenir la resistencia bacteriana, y se deben realizar pruebas de función renal y audición antes y durante el tratamiento. Siempre debe ser prescrito y supervisado por un profesional de la salud capacitado.

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