DICCIONARIO MÉDICO

Queilectomía

¿Qué es la queilectomía?

La queilectomía, en el amplio y siempre en evolución campo de la medicina, es un procedimiento quirúrgico que se realiza principalmente para abordar problemas en los pies, en concreto, el trastorno conocido como Hallux Valgus o, en términos más comunes, juanetes. Este procedimiento se realiza con frecuencia cuando otras modalidades de tratamiento, como los cuidados conservadores o el uso de calzado ortopédico, han demostrado ser ineficaces para aliviar los síntomas del paciente.

La queilectomía implica la extracción de una parte del hueso metatarsiano, específicamente en el área del primer metatarsiano, que es el hueso más largo del pie y se localiza en el área del dedo gordo. Esta intervención quirúrgica busca aliviar el dolor y mejorar la función del pie, permitiendo a los pacientes retomar sus actividades diarias con mayor comodidad y sin las limitaciones previas asociadas al Hallux Valgus.

Antes de proceder con la queilectomía, los médicos a menudo intentarán una variedad de tratamientos no quirúrgicos. Estos pueden incluir cambios en el calzado, el uso de férulas o dispositivos ortopédicos, y la administración de medicamentos para el dolor. Si estos tratamientos no logran aliviar los síntomas del paciente, la queilectomía puede ser considerada.

El proceso de queilectomía comienza con una evaluación detallada por parte de un cirujano ortopédico. Se realiza un examen físico y se pueden ordenar pruebas de imagen, como radiografías, para evaluar el grado de deformidad del Hallux Valgus y determinar la mejor estrategia quirúrgica.

La queilectomía es un procedimiento ambulatorio, lo que significa que los pacientes suelen ser dados de alta el mismo día de la cirugía. Después de administrar la anestesia, el cirujano realizará una incisión en la zona del juanete y procederá a eliminar la porción de hueso que está causando el problema. A continuación, el cirujano puede realinear los huesos y fijarlos en su lugar con la ayuda de dispositivos de fijación como tornillos. Finalmente, la incisión se cierra y se coloca un vendaje.

A pesar de ser una intervención segura y con una alta tasa de éxito, la queilectomía, como cualquier procedimiento quirúrgico, implica algunos riesgos y posibles complicaciones. Estos pueden incluir infección, sangrado, daño nervioso, recurrencia de la deformidad y complicaciones asociadas a la anestesia. También es importante tener en cuenta que la recuperación completa puede llevar varias semanas o incluso meses, durante los cuales se puede requerir fisioterapia y otros tratamientos de rehabilitación.

Aun así, muchos pacientes experimentan una mejora significativa en sus síntomas y en su calidad de vida tras someterse a una queilectomía. Con el tiempo, pueden retomar sus actividades diarias sin dolor y con una mejor función del pie.

© Clínica Universidad de Navarra 2023

¿Quiere estar al día sobre temas de salud?

Reciba el boletín de la Clínica para estar al día de novedades y avances médicos

La información proporcionada en este Diccionario Médico de la Clínica Universidad de Navarra tiene como objetivo principal ofrecer un contexto y entendimiento general sobre términos médicos y no debe ser utilizada como fuente única para tomar decisiones relacionadas con la salud. Esta información es meramente informativa y no sustituye en ningún caso el consejo, diagnóstico, tratamiento o recomendaciones de profesionales de la salud. Siempre es esencial consultar a un médico o especialista para tratar cualquier condición o síntoma médico. La Clínica Universidad de Navarra no se responsabiliza por el uso inapropiado o la interpretación de la información contenida en este diccionario.