DICCIONARIO MÉDICO

Tuberosidad tibial

¿Qué es la tuberosidad tibial?

La tuberosidad tibial es una prominencia ósea que se encuentra en el hueso de la tibia, que es uno de los dos huesos largos situados en la parte inferior de la pierna, siendo el otro el peroné. La tibia es el hueso más grande de los dos y se sitúa en la parte medial y anterior de la pierna. La tuberosidad tibial se encuentra en la porción proximal de la tibia, es decir, cerca de la articulación de la rodilla, y se presenta como una prominencia ósea en la parte anterior del hueso.

La tuberosidad tibial es un punto de inserción para el tendón de la rótula, que es una extensión del cuádriceps, el principal músculo del muslo. Este tendón se extiende desde la rótula, un hueso sesamoideo situado en la parte frontal de la rodilla, hasta la tuberosidad tibial. La función del cuádriceps, y por tanto del tendón de la rótula, es permitir la extensión de la rodilla, lo que es esencial para actividades como caminar, correr, saltar y ponerse de pie.

La tuberosidad tibial también juega un papel importante en la estabilidad de la articulación de la rodilla. La línea de fuerza que pasa a través del cuádriceps, el tendón de la rótula y la tuberosidad tibial, conocida como el mecanismo extensor, ayuda a mantener la alineación correcta de la rodilla durante el movimiento y a resistir las fuerzas que actúan sobre la articulación.

Las lesiones o condiciones que afectan a la tuberosidad tibial pueden causar dolor en la rodilla y dificultad para mover la articulación. Una de las lesiones más comunes que afectan a esta estructura es la apofisitis de la tuberosidad tibial, también conocida como enfermedad de Osgood-Schlatter. Esta condición, que suele afectar a los adolescentes que practican deporte, se produce cuando la repetida tensión en el tendón de la rótula provoca inflamación y dolor en la tuberosidad tibial. El tratamiento para la enfermedad de Osgood-Schlatter generalmente implica reposo, fisioterapia y, en casos graves, puede requerir cirugía.

Otra condición que puede afectar a la tuberosidad tibial es la tendinitis rotuliana, una inflamación del tendón de la rótula que puede ser causada por el uso excesivo o por un golpe directo en la rodilla. La tendinitis rotuliana puede causar dolor en la parte frontal de la rodilla, debilidad en la pierna y dificultad para extender la rodilla.

© Clínica Universidad de Navarra 2023

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