DICCIONARIO MÉDICO

Superconductivo

¿A qué se llama superconductivo en Medicina?

La superconductividad es un fenómeno que, aunque a primera vista puede parecer exclusivo del campo de la física, tiene aplicaciones significativas y profundas en el campo de la medicina. En esencia, la superconductividad se refiere a la capacidad que tienen ciertos materiales de conducir la corriente eléctrica sin resistencia alguna cuando se enfrían por debajo de una cierta temperatura crítica. Esta es una propiedad que desafía las leyes convencionales de la física y que fue descubierta por primera vez en 1911 por el físico Heike Kamerlingh Onnes.

En el mundo de la medicina, la superconductividad ha encontrado una aplicación vital en el campo de la imagenología médica. Específicamente, la resonancia magnética (MRI, por sus siglas en inglés) depende en gran medida de la superconductividad para su funcionamiento. Los dispositivos de MRI utilizan potentes imanes superconductores para generar campos magnéticos altamente uniformes y estables, los cuales son esenciales para obtener imágenes detalladas del interior del cuerpo humano. Sin los imanes superconductores, la tecnología de la MRI tal como la conocemos hoy en día no sería posible.

Los imanes superconductores utilizados en los dispositivos de MRI están hechos generalmente de niobio y titanio, y se enfrían a temperaturas extremadamente bajas utilizando helio líquido. Una vez enfriados, estos imanes pueden conducir la corriente eléctrica sin resistencia, lo que les permite generar campos magnéticos potentes y uniformes durante largos períodos de tiempo. Esto no solo mejora la calidad de las imágenes obtenidas, sino que también reduce el consumo de energía y el costo operativo de los dispositivos de MRI.

Además de la MRI, la superconductividad también tiene potencial en el campo de la terapia con protones, una forma avanzada de radioterapia utilizada para tratar el cáncer. Los aceleradores de protones utilizan imanes superconductores para guiar los protones hacia el tumor, permitiendo un tratamiento más preciso y menos dañino para los tejidos circundantes.

Sin embargo, a pesar de sus importantes aplicaciones en la medicina, la superconductividad también presenta desafíos. El más notable de estos es el hecho de que la superconductividad sólo puede lograrse a temperaturas muy bajas, lo que requiere el uso de sistemas de enfriamiento sofisticados y costosos. Esto limita la practicidad y accesibilidad de las tecnologías superconductoras en algunos entornos.

Además, aunque los materiales superconductores pueden conducir la corriente eléctrica sin resistencia, no son inmunes a las perturbaciones magnéticas. Esto significa que deben ser protegidos cuidadosamente para mantener su superconductividad, lo cual puede ser complicado en un entorno hospitalario donde existen muchas otras fuentes de campos magnéticos.

© Clínica Universidad de Navarra 2023

¿Quiere estar al día sobre temas de salud?

Reciba el boletín de la Clínica para estar al día de novedades y avances médicos

La información proporcionada en este Diccionario Médico de la Clínica Universidad de Navarra tiene como objetivo principal ofrecer un contexto y entendimiento general sobre términos médicos y no debe ser utilizada como fuente única para tomar decisiones relacionadas con la salud. Esta información es meramente informativa y no sustituye en ningún caso el consejo, diagnóstico, tratamiento o recomendaciones de profesionales de la salud. Siempre es esencial consultar a un médico o especialista para tratar cualquier condición o síntoma médico. La Clínica Universidad de Navarra no se responsabiliza por el uso inapropiado o la interpretación de la información contenida en este diccionario.