Rinitis medicamentosa

¿Qué es la rinitis medicamentosa?

La rinitis medicamentosa es una inflamación de la mucosa nasal como consecuencia del abuso de vasoconstrictores locales. Esta inflamación es consecuencia directa del uso excesivo y prolongado de descongestionantes nasales tópicos. A pesar de que estos medicamentos, en un principio, son beneficiosos para reducir la congestión nasal, su uso prolongado puede causar el efecto contrario, es decir, un aumento en los síntomas de congestión. La rinitis medicamentosa no es una reacción alérgica a la medicación, sino más bien una reacción a su uso excesivo.

El mecanismo exacto detrás de la rinitis medicamentosa es complejo y no se entiende completamente. Sin embargo, se cree que el uso prolongado de descongestionantes nasales provoca una vasodilatación reactiva, lo que lleva a un aumento del flujo sanguíneo a las membranas nasales, resultando en hinchazón y congestión.

Los síntomas de la rinitis medicamentosa pueden incluir congestión nasal persistente que no mejora o que empeora después de usar un aerosol nasal, necesidad de usar dosis cada vez mayores del medicamento para lograr el efecto deseado y síntomas de congestión que empeoran después de dejar el medicamento. Es importante entender que, si bien los descongestionantes nasales pueden ofrecer un alivio rápido de los síntomas de congestión, no tratan la causa subyacente de la congestión nasal y, cuando se usan en exceso, pueden empeorar el problema.

El diagnóstico de la rinitis medicamentosa generalmente se basa en la historia clínica del paciente. El profesional médico tomará nota de los medicamentos que el paciente ha estado usando, la duración del uso y los síntomas presentes. Es fundamental diferenciar la rinitis medicamentosa de otras formas de rinitis, como la rinitis alérgica, la rinitis no alérgica o la rinitis infecciosa.

El tratamiento principal para la rinitis medicamentosa es dejar de usar el medicamento que la causó. Si bien esto puede sonar simple, puede ser un proceso desafiante para muchos pacientes, ya que los síntomas de congestión pueden empeorar inicialmente después de suspender el medicamento. Durante este tiempo, se pueden usar otros tratamientos para ayudar a aliviar los síntomas, como corticosteroides nasales, que reducen la inflamación de la mucosa nasal, o soluciones salinas para irrigar las fosas nasales. Además, se debe evitar la exposición a irritantes nasales, como el humo del tabaco o el aire contaminado, que pueden empeorar los síntomas.

© Clínica Universidad de Navarra 2023